La historia de Orfeo...



Orfeo navegaba solventemente su timón, estaba él y las estrellas, su mirada atenta al horizonte impredecible y su piel perspicaz a la dirección y fuerza del viento, cuando de pronto descubrió una especie de bote que cuidaba a una mujer vestida con mantos que compartían los colores que tomaba el mar en la noche, se consternó, era más susto lo que sintió que cualquier otra emoción posible, con inseguridad se acercó y la llamó, ella parecía encontrarse en un momento de meditación, sin embargo los gritos de Orfeo llegaron a sus oídos, así volteó y comenzó a llamarlo, ¡marinero, sálveme, estoy perdida, se lo suplico! Orfeo se desesperó, se fue acercando cada vez más, luego le lanzó una cuerda con un salvavidas, ella lo sostuvo y él fue halando con gran cuidado hasta poder sujetarla y subirla a su pequeña embarcación, ella lo abrazó efusivamente, agradeciéndole hasta más no poder. Orfeo la hizo pasar a su pequeña cubierta prestándole abrigo y ofreciéndole algo caliente que tomar y pan para comer.
- Estoy desde la tarde naufragando, me dio la noche y me había alejado de la orilla hasta perderla, sino fuera por usted hubiera perecido.
- ¿Pero, qué hacía por estos rumbos?- preguntó ella.
- Yo sólo descansaba, siempre que quiero pensar y soñar me refugio en mi barco, suelo alejarme de la orilla toda la noche hasta el medio día.
- ¿Solo?
- Sí.
- ¿Y sus amigos o mujer?- preguntó ella.
- En este momento duermen y se reponen de un día de arduo trabajo. La vida cada vez deja menos momentos para reflexionar, nuestros cerebros se han habituado a pensar cómo aprovechar más el tiempo en trabajar y no en contemplar- respondió Orfeo sin mirarla.
- Lo entiendo- asintió ella.
- ¿Cuál es tu nombre? - preguntó cansado.
- Deméter.
- ¿También tú buscabas un tiempo para ti?- dijo Orfeo.
- Sí, en realidad yo tomé la misma iniciativa que tú, sólo que impulsivamente, sin planificar.
- Bueno, me llamo Orfeo y me da gusto que alguien nuevo me acompañe esta noche. Tengo deseos de conversar, en realidad siempre que hago estos paseos dialogo solo, si se puede tal cosa. La providencia te ha enviado para compartir mi soledad.
- Yo diría que te envió para salvarme.
- Es así, nos unió para salvarnos a ambos. Las personas se encuentran con el mayor sentido que puede haber, sólo que no nos percibimos por el ajetreo de nuestras vidas. Sabes, siempre soñé que encontraría una noche alguien especial en el mar, es gracioso, pareces una aparición
- Tú y tu bote parecen una ilusión.
- Como te hallé lo creo. Dime, cuando te vislumbré orabas.
- Sí. Le rezaba a Atum-Ra, que es el generador universal, Él hizo la luz ante las tinieblas mediante la voz. Es por eso que nos la dio, para comunicarnos con él.-dijo Deméter.
- ¿De dónde es esa religión?
- Es egipcia. ¿Tú eres creyente?
- Sí, soy cristiano.
- Entonces somos seres llenos de fe.-concluyó Deméter.
- Tú lo has dicho, ahora te voy a dar una sorpresa, Orfeo se acercó a una caja vieja y sacó una botella un poco empolvada, ¡mira!, es para la ocasión.
- ¡Increíble, se acabó mi naufragio!
- Es de mi abuelo, este barco lo heredé y siempre supe de esta botella, pero nunca me provocó tomarla, hoy creo que lo amerita.
- ¿Sabes de qué huía hoy?- preguntó Deméter.
- ¿Huías?
- De mi nombre.
- ¿Cómo?
- Mi nombre fue elegido por el sacerdote de mi pueblo. Soy hija de los rituales de la noche que tiene mi comunidad. Son en luna nueva cada cien años y tenemos la misión de preservarnos dentro de nuestro pueblo sin tener contactos con foráneos. Mi nombre lo han llevado mujeres de un mismo linaje. En realidad mi nombre es griego, pero su origen egipcio es Isis.
- No sé si me hablas en serio o me estás asustando.
- Es verdad lo que te cuento, decidí escapar de mi pueblo, todas las Démeter sufren de locura muy jóvenes por el encierro, pero antes han dado luz a una niña. La muerte de estas mujeres no es un error de la tradición sino es que está comprendida porque la juventud es virtud de quien cumple este papel.
- Entonces, ¿te están buscando?
- No, al escapar inmediatamente recibo una maldición de Ra y pierdo mi nombre como mi fertilidad y capacidad de unirme a un hombre. Está contemplado en Los Libros de los muertos. Por eso oraba a Ra para que me perdone.

Después de decir esto, Démeter se echó a llorar desconsoladamente. No podía creer Orfeo la historia que escuchaba, quería pensar que aquella mujer estaba completamente loca, pero la sinceridad con que contaba y el espesor de sus ojos provocaban en él un presentimiento de estar a lado de más que una simple mujer, además de observarle una belleza bastante extraña.

En consuelo, Orfeo le ofreció su ayuda, sin embargo ella le dijo que no podría él hacer nada frente a los designios de la providencia.

Permanecieron un tiempo en silencio cuando Deméter le pidió que abra la botella, que la perdone y que más bien bebieran y conversaran mucho.

Orfeo con el mejor ánimo cumplió su pedido e hizo un brindis por tenerla en su barco esa noche.

- Es una noche hermosa, la de un hombre en el océano ocupado por la noche que regala estrellas, al que de pronto se le otorga UNA -dijo Orfeo.
- Es la de una mujer perdida en la inmensidad sin punto de ubicación, hasta que encuentra un hombre con la plenitud del mar.-dijo Deméter.
- Dame tu mano, Orfeo- él se la entregó con temor (siempre dejarle nuestra mano a alguien revela nuestra pasión). Tienes una vida llena de historias que busca amor en cada puesta de sol, amas la eternidad que poseen los momentos en nuestro corazón a pesar de sufrir su terrible fugacidad. Amas la soledad que te presta la noche en cada visita al mar que esperas sea más larga de lo normal. En resumen, adoras la naturaleza. El amor personal siempre fue lo más escaso de encontrar en la historia de hombres como tú. Hombres que edifican sus relaciones con seria racionalidad son sorprendidos escépticamente cuando alguien no deja su mente. ¿Por qué temes tanto amar a un mortal como tú? Has preferido amar los ocasos, el color de la tarde, las estrellas, el mar.
- Deméter, para algunos es fácil dar amor a cualquiera pero para mí siempre fue una tarea difícil. Y es que las personas siempre se van, tienen sus propias vidas, buscan sus propios sueños, en cambio el cielo y el mar siempre estarán allí, nunca me dejarán. Es algo que nunca he podido soportar por eso sólo quiero descansar.
- Vamos a mirar el cielo, juntos salieron para soñar. ¿Qué sueñas en este momento?-preguntó Démeter.
- Sueño por que nunca te vayas de mi lado, por que seas como el cielo y el mar que siempre está, por que dibujes el mismo ideal que yo. Siento tu soledad Orfeo, creo que hombres como tú no deberían estarlo, seres lúcidos, claros y mágicos ayudan a construir personas maravillosas. Este momento podría ser el último de mi vida y sin problemas cedería, la sensación que me das, sólo un ave la puede comprender, pues ella se siente protegida por el cielo y a la vez libre, sensaciones imposibles de unir. Orfeo sintió su espíritu expandirse, todos los recuerdos desaparecieron para donar el espacio a ese momento.
- Cerró los ojos y dejó su corazón flotando, ella lo tomó en sus brazos y se fue desvaneciendo lentamente hasta que él dejó de sentir su mano suave y comunicante, volteó a verla y ya no estaba. La buscó en todo el pequeño barco con gran desesperación, miró la totalidad desvanecerse sin él hasta darse cuenta que se acababa la noche con su pequeño sueño, con su amor, y a pesar que Deméter se había llevado su corazón, Orfeo lloró hasta quedarse dormido, lo suficiente como para no querer despertar más.

Esa mañana nadie vio volver aquel insignificante barco que siempre salía todas las noches sin decir porqué.

Cada noche puedo soñar "por que nunca te vayas de mi lado, por que seas como el cielo y el mar que siempre está- y como mi inmensa luna que ilumine mi camino en la obscuridad de la noche-, por que dibujes el mismo ideal que yo". Porque en realidad -tu eres quien vuelve cada instante en algo eterno ni mi vida desde hace tiempo; porque votear y ver la luna no es lo mismo ya...; porque eres tu quien me puede encontrar una sonrisa aun estando perdido.... y por mil y un cosas mas, pero eso me atrevo a soñararlo, y como buen idealista, creo que cada idea y cada sueño que pasa por mi mente puede ser realidad, por eso TE AMO!! y aunque no haye otra forma de expresarlo mejor, ya sea porque me bloque o lo que sea, te lo repito ...TE AMO!! enrealidad TE AMO!! y te doy gracias por todo lo que me das y todo lo que generas en mi...
TE AMO!!

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